miércoles, 15 de mayo de 2013

Acerca de las Bajas de los Funcionarios

Según comentan hoy distintos periódicos, como por ejemplo La Razón, la Comunidad de Madrid al revisar las bajas de los funcionarios, se ha ahorrado cerca de 39 millones de euros al incorporar cerca de 6000 funcionarios a su puesto de trabajo por cogerse bajas que no son tales y, por tanto, ahorrarse dicho dinero de la sustitución de dichos trabajadores. Se han revisado cerca de 46.000 bajas, de las cuales sólo 6000, según la administración, no eran tales.

En tres años se ha pasado además de una media de 21 días de baja a los 11 actuales.

Sobre estas cifras debemos decir que no sabemos de donse sale ese ahorro, pues hay que tener en cuenta que la Comunidad de Madrid no está reponiendo las bajas por enfermedad, solamente en los sectores prioritarios, sanidad y educación, y en dichos casos, como mínimo 15 días después de producirse dicha baja.

Además, hoy en día, a los funcionarios se les aplica un fuerte descuento por cogerse la baja laboral, nada más y menos que un 50% del sueldo los primeros días. Por tanto, a más bajas, más ahorro para la administración.

Nosotros pensamos que, realmente si miramos las cifras, en un año, de 108.000 funcionarios de la Comunidad, el que solo haya 6000 bajas que no son tales, nos indica una gran responsabilidad de dichos funcionarios en su puesto de trabajo, suponiendo que dichas cifras sean correctas. Hay que tener en cuenta además, que los funcionarios sobre todo en enseñanza y sanidad, y últimamente, los que atienden a las oficinas de empleo, entre otros, sufren presiones y problemas asociados a su labor docente y asistencial.

Estos problemas se acentúan además por la alta edad media del funcionario, que se está elevando como consecuencia de la no reposición de efectivos, la sobrecarga de trabajo (375.000 empleados públicos menos), y el continuo hostigamiento de los gobernantes para ahorrar masa salarial, para privatizar, y, además, para buscar un chivo expiatorio de la crisis que padecemos.

Por otro lado, lo que realmente ha ocurrido con esas 6000 bajas, es que muchos de esos funcionarios se dieron de alta voluntariamente ante la simple llamada de la administración (1800 empleados), y, a eso, se le llama miedo, no que estuvieran plenamente restablecidos de sus dolencias. Hay que recordar que muchos de los funcionarios o empleados públicos, son personal laboral y personal interino, es decir, un tipo de personal fácilmente despedible, como hemos visto.

Para terminar este comentario, el que suscribe estas líneas sufrió un percance, de tal forma que tuvo que cogerse la baja, pero a los cuatro días, ya algo mejor, solicitó voluntariamente el alta, a pesar del consejo del médico que indicaba reposo de al menos otra semana, para no seguir perdiendo dinero por causa de la baja.




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